Google presentó esta semana Ironwood, su nuevo chip de inteligencia artificial (IA) de séptima generación, diseñado para mejorar significativamente el rendimiento de aplicaciones de IA, especialmente aquellas que requieren procesamiento en tiempo real, como los chatbots.
Este chip, parte de la familia de TPU (Tensor Processing Unit , se destaca por ofrecer el doble de rendimiento por unidad de energía en comparación con su predecesor, Trillium. Además, puede funcionar de forma conjunta en configuraciones de hasta 9.216 chips, lo que permite manejar modelos de IA a gran escala con eficiencia.
Aunque se trata de un componente físico, Google no lo comercializa directamente, sino que lo utiliza internamente y lo ofrece a través de Google Cloud. De este modo, las empresas pueden acceder al poder de procesamiento de Ironwood sin necesidad de tener el hardware físicamente, aprovechándolo en sus propias soluciones de IA desde la nube.
Con este lanzamiento, Google refuerza su estrategia de competir en el mercado de chips especializados en IA, dominado por grandes jugadores como Nvidia, y consolida su posición como proveedor de infraestructura avanzada para el desarrollo de inteligencia artificial a nivel global.